Lo bueno de ser yo es que no me exijo explicaciones a mi
mismo. Sino tendría mucho a lo que responder, y, siendo sincero, no me creo
capaz de responder a todo lo que me cuestionara. Creo que actúo de forma
prematura, exageradamente romántica y excéntrica, pero no me desagrada esta
forma de amar. Pero… ¿a quién amo? Y ¿Por qué? –siempre ese por que sin
respuesta…- ¿Qué pretendo? Tal vez no sea ésta mi parte racional sino mi parte
pasional, una parte que no me deja vivir de forma normal. Una parte de mí que exige
acción, emoción, daño y satisfacción.
Pero creo que no excusa el hecho de que quizás, y sí, digo
quizás, me haya enamorado de una chica luxemburguesa de la que conozco poco más
de lo que conocería a un completo extraño. Solo sé que esa sonrisa que tiene en
una foto suya que encontré por una red social me llena más que… no encuentro
comparación poética posible, Solo aspiro a ser la sombra de la sombra del gato
callejero que maúlla a su ventana desde la casa de enfrente, con ser eso sería
feliz, ahora lo soy, pero un feliz incompleto… y no hay mayor infelicidad que
la perspectiva de que aquello que te completa no esta a tu alcance. Amante,
amador profundo… y tal vez algo resentido
Amante entre amantes
loco entre locos
delirios de un
diamante
suspiros de oro roto
Dualidad perseverante
al alma inconsciente aterra
un corazón amenazante
instintos que a la vida se apegan
Dualidad perseverante
al alma inconsciente aterra
un corazón amenazante
instintos que a la vida se apegan
Sólo tú eres responsable
sólo a ti es a quien adoro
sólo a ti rindo homenaje
sólo tú eres tesoro
Quítense
ostentosidades
que se quiten
abalorios
todo cuanto tu piel
cubre
espinas son para los
ojos
Sin embargo no te alcanzo
espejismo del sediento
tal belleza, tal sablazo
¡atraviesa! ya no siento...
Pues, tuya era mi vida
y ya a nadie pertenezco
si con verte cobre vida
legítimo, si ahora muero
¡Oh! dulce joya
¡oh! cruel destino
toma mi vida si
quieres
hazme del diablo
vecino
mas dámela en esta
vida,
dame todo cuanto es
mío.
Príncipe de ojo roto
príncipe de ojo
fundido
por tal ideal en ti
reunido
quedé ciego, muerto y
vivo
No hay comentarios:
Publicar un comentario