Si llama la desidia
que se vaya y que no vuelva
si fracasan las delicias
que aparezca la tiniebla
que acaricie tus mejillas
mientras caen lágrimas negras
procedentes de tus ojos
débiles, tristes y afligidos
el puñal teñido de rojo
volvió locos los sentidos
Un mundo de negrura
donde la ternura se ha olvidado
un mundo sin pesadillas
pues están ya al otro lado
Donde calcinada ceniza
cubre los muebles incoloros
y una nube de polvo
eclipsa todas las sonrisas
Locura, sutura que la desesperanza
coloca, y con ella humilla, a corazón roto
Cuerda o veneno o ventana
¡miedo como todo tesoro!
vida corrompida
yo os correspondo
soy una afilada espina
y en mi mismo me enrosco
y sangro, sangro en demasía
cuanto más me abrazo
por no sentirme solo
Canto a la desesperanza
porque en el fondo soy demonio
tal vez fui algo en vez pasada
pero, si fue así, en verdad lo ignoro
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